Dios tiene un plan. Toda la obra que Él realiza en el universo, desde los siglos pasados hasta la eternidad futura, se lleva a cabo conforme a Su plan. Dicho plan debe realizarse por medio del hombre y también en él; por consiguiente, Dios desea ganar a todos los que Él creó y redimió a fin de llevar a cabo Su propósito.
No piensen que somos útiles a Dios por casualidad. El hecho de que seamos útiles a Dios se basa completamente en el plan que Él ya predeterminó. Toda aquella persona que Dios utiliza se halla dentro de la esfera de Su plan. Ya que el plan de Dios se efectúa solamente en el hombre, Él tiene que usar al hombre extensamente. Con tal que una persona sea ciudadano de determinado país, se halla en la esfera donde puede ser de utilidad para ese país. Asimismo, los que pertenecemos al reino de Dios estamos en la esfera donde podemos ser de utilidad para Dios.